viernes, 24 de octubre de 2014

PASEANDO POR LA CIÉNEGA

En los recorridos de mi bello estado de Michoacán me surgió incertidumbre acerca del clima de la Ciénega, mis ideas ingenuas es que aproximadamente se encuentra a unos 1600 a 1800m sobre el nivel del mar, y lo veía con mucha proximidad a zonas boscosas.

La curiosidad sobre el suelo y clima de la región comenzó al sentir que "el sol de aquí calienta mucho" y ver que hay bastante matorral y pocos árboles.

Con algunos cuestionamientos sobre tipo de suelo comencé, y entre los artículos rescatados señalo aspectos de interés y reflexión, como muestra para trabajar nuestros futuros proyectos didácticos.

El geógrafo francés Jean Tricart (1920-2003) definió el espacio geográfico como la “epidermis del planeta Tierra”, que puede analizarse según su sistema espacial (la locación) o su sistema ambiental (la ecología).

Es importante destacar que todo espacio geográfico es el resultado de la historia, ya que cada sociedad tiene su propio modo de organización y deja sus huellas en el paisaje. El espacio geográfico, por lo tanto, depende del proceso histórico.

En ciertos lugares es posible apreciar una superposición de espacios geográficos, con vestigios que se remontan a la prehistoria y diversas marcas que fueron generadas a lo largo de la historia.

El espacio geográfico controlado bajo un orden administrativo se conoce como territorio y puede estar conformado por diversas entidades, como municipios, comarcas, provincias o regiones.

Cabe mencionar que para que exista un espacio geográfico debe haber, en primer lugar, un espacio natural que sirva de punto de asentamiento y desarrollo a una sociedad. Con el correr de los años, acciones tales como la tala de árboles, la poda, el desvío de corrientes de agua y la construcción de edificios, entre otras muchas formas en las que el ser humano modifica todo a su paso, el espacio natural se convierte en geográfico.

El espacio geográfico no es algo estático; por el contrario, dada nuestra naturaleza y el hecho de que nunca dejamos de tener necesidades, las transformaciones que en él realizamos son continuas y cambiantes, lo cual responde directamente a la inevitable evolución cultural. Surge a partir de la relación entre dos elementos primordiales para nuestra vida: la naturaleza y la sociedad. Estos dos, a su vez, dan lugar a la economía.

Los elementos naturales son el conjunto de toda creación de la naturaleza, como pueden ser los mares, los ríos, el relieve, la vegetación, las diversas especies animales y las catástrofes naturales; los sociales incluyen los grupos organizados de personas (los pueblos), la religión, la cultura y la política; los económicos son el resultado de la imposición de lo social sobre la naturaleza, y representan la principal causa de modificaciones al espacio natural.

Definición de espacio geográfico:  http://definicion.de/espacio-geografico/#ixzz3ER3TIvdw

Lo primero que observé fue el tipo de suelo, suponiendo que existen factores que favorecen la fauna pues una explicación, para mi razonable, es que el tipo de suelo se sobreponía como una condición hasta para la misma vegetación.

En términos de Geología:

Suelos Pedalfer
El termino pedalfer, deriva del griego pedon, que significa ''suelo'', y los símbolos Al (aluminio) y Fe(hierro). La podsolización es el proceso normal en los climas templados y húmedos con una cubierta de bosques. Este proceso concentra el hierro y el aluminio en el Horizonte B (Zona B: El Horizonte B es el subsuelo que contiene arcillas y coloides deslavados hacia abajo desde el lecho de la cima de la secuencia, es principalmente una zona de acumulación y su color es rojizo). El calsio, el sodio y el magnesio son deslavados completamente y la sílice puede ser separada en forma de coloidal. Los minerales arcillosos caolínicos son los productos finales normales del proceso. 

Suelos Pedocales
La palabra pedocal, se deriva del griego pedon y las primeras letras de CALcita (carbonato de calcio). La clasificación ocurre en los climas secos con vegetación consistente en arbustos o pastos. Este proceso concentra los carbonatos de calcio y magnesio en el Horizonte B. Una zona característica distinta es la zona blanquecina ''caliche'' asociada comúnmente con el perfil. El mineral arcilloso asociado es la montmorillonita. 


Suelos Lateríticos
La laterización es el proceso normal formador de suelos en los climas tropicales. Concentra a los óxidos de hierro y aluminio, o ambos, en el horizonte B, a expensas de la silice, que es separada por lixiviación. El intemperismo químico es rápido, los minerales caoliníticos son los productos finales normales en algunas circunstancias, pero otras, los minerales arcillosos no son estables.

 




Ahora comparemos a estas subdivisiones del orden de suelo según la Wikipedia

Pedocal
Es una subdivisión de la orden de suelo zonal. Es una clase de suelo que se forma en semiáridas y áridas regiones. Es rico en carbonato de calcio y tiene bajo suelo la materia orgánica. Con sólo un delgado horizonte A (capa superior del suelo ), y la precipitación intermitente calcita , otrossolubles minerales eliminados normalmente por el agua pueden acumularse en el horizonte B (subsuelo) formar una capa cementada conocido comocaliche . No se utiliza en el actual sistema de clasificación del suelo, pero el término comúnmente muestra en textos.

Pedalfer
Se compone de aluminio y óxidos de hierro. Es una subdivisión de la orden de suelo zonal que comprende un grupo grande de los suelos en los que sesquioxidos aumentan en relación con la sílice durante la formación del suelo. Pedalfers ocurren generalmente en zonas húmedas. No se utiliza en el actual sistema de clasificación del suelo, pero el término comúnmente muestra en textos.



Las fuentes fueron abriendo nuevas interrogantes debía encontrar ahora algunos términos inusuales, para lo que encontré la palabra Edafología, la cual se refiere a la ciencia que estudia los suelos, para muestra un botón con un pequeño artículo relacionado que adjunto a continuación.

La formación de un suelo depende de factores tan diversos como son:

La roca madre
Es la roca que genera el suelo. Cuanto más dura sea esta roca, más tardará en meteorizarse y transformarse en suelo.

El clima
En climas húmedos las rocas se meteorizan antes debido a la acción del agua. Esto permitirá que se forme mejor que en un climaseco.

El relieve
Cuando el relieve es suave los productos de la meteorización quedan donde se encontraba la roca madre, generando un suelo. Si el relieve es abrupto los fragmentos de roca meteorizada son arrastrados rápidamente hacia otros lugares. Por eso en estas zonas es más difícil que se forme un suelo con todos los horizontes, es decir, un suelo evolucionado.

Tipos de suelo:

Algunos de los cabos sueltos hasta el momento es lo referente a los “horizontes del suelo”, lo primero q a la mente de cualquiera vendría es un corte de cerro en donde pasan una carretera, las varias franjas que se perciben, con colores diversos pueden llamarnos a la reflexión.

Horizontes
La diversidad morfológica de los horizontes del suelo es de tal naturaleza que hay que recurrir a un sistema estricto de denominación, ello evita las confusiones a la hora de transferir información de unos autores a otros.

Los horizontes del suelo se designan por una letra mayúscula que indica el tipo genético. Se utilizan la H y la O para los horizontes orgánicos. La A, E y B, para los horizontes minerales y C y R para las capas constituidas por el material original más o menos transformado.

Esa letra puede ir seguida de otra minúscula para indicar alguna característica importante pero no incluida en la definición de la mayúscula correspondiente. Cuando un horizonte principal muestre características diferentes a lo largo de su espesor, que no afecten a su denominación completa, incluyendo sufijos, puede dividirse en varios subhorizontes empezando con el "1" en el subhorizonte más superficial.

Cuando aparezca en un perfil más de un ciclo de formación, los horizontes correspondientes llevaran un prefijo constituido por un número arábigo consecutivo, considerando el ciclo actual como "1" y siguiendo en orden creciente de juventud. En el ciclo actual no se utiliza el prefijo por lo que el primer número utilizado será el "2". Estas diferencias de ciclo se conocen como discontinuidades litológicas y si existiese una entre dos horizontes con la misma denominación, se consideraran como uno solo a efectos de subdivisión (...Bt1, Bt2, 2Bt3, 2C...).

Horizontes de transición.
Están situados entre dos de los horizontes descritos, de forma que sus propiedades se mezclan y resulta difícil inclinarse por uno de ellos. Se denominan por las letras de ambos situando en primer lugar la correspondiente al horizonte al que más se parece.

Color
El color es muy variable y también muy importante. Hay que prestar mucha atención tanto a la matriz de los horizontes como a la presencia de manchas.

La característica principal de la formación de la parte mineral del suelo es la generación de arcilla. Todos los minerales esenciales que constituyen la fracción arcillosa son blanquecinos, pero no es ése el color habitual de las arcillas extraídas del suelo, la razón es la presencia de unas sustancias coloreadas y con un fuerte poder de tinción que se conocen como agentes cromógenos.


El color no es una propiedad frívola, como podría parecer, sino que nos ofrece numerosas claves sobre la formación del suelo y de su comportamiento. Por ello es necesario expresarlo con gran precisión para que pueda ser interpretado por personas diferentes de las que realizan su descripción.


Textura
La textura es la forma en la que se distribuyen por tamaños las partículas del suelo. Su determinación ha de hacerse mediante el correspondiente análisis.

No obstante, en el campo puede apreciarse de forma indirecta formando una pequeña bola entre los dedos, con ayuda de una pequeña adición de agua si el suelo está demasiado seco. Del comportamiento de esa bolita puede deducirse el contenido en las diversasfracciones. Cuanto más moldeable es la bolita formada, mayor será el contenido en arcilla. La untuosidad o pegajosidad de la misma es un índice del contenido en limo. La arena se detecta por el ruido que hace al amasarla entr los dedos, cuanto mayor es el chirrido que se produce mayor será su contenido en arena.

Con cierta experiencia pueden distinguirse varios tipos texturales, pero lo más interesante es la comparación del comportamiento de los diferentes horizontes, para lo cual no es necesaria una gran experiencia sino una modesta capacidad de observación.


Para cerrar el post con broche de oro, busque algunas reseñas históricas de la región y la compilación más grata es la que incluiré como cierre, a pesar de su amplitud, pues me abre nuevas inquietudes naturalistas e incluso sentimientos patrióticos cuando intento imaginar las cosas preciosas que encontraron los Españoles en el tiempo de su colonización de américa.




El paisaje de la Ciénaga de Chapala ha sufrido transformaciones que van de humedal a terreno agrícola. En su origen, la ciénaga y el lago de Chapala fueron parte de un enorme lago de agua salada que, formado por un movimiento telúrico, se extendía hasta lo que hoy es Pátzcuaro, Cuitzeo, La Piedad, Aguascalientes, Tuxpan y Guadalajara. La enorme cuenca de la que forma parte, lo convirtió en receptor de grandes volúmenes de agua dulce que se mezclaban con sus aguas saladas y que, cuando rebasaban los límites de contención, iban a dar al océano pacífico por medio del río Santiago. Algunas especies acuáticas fueron adaptándose a los cambios y fue así que se formó la familia del denominado pescado blanco. La acción sobre el medio ambiente ejercida por los indios asentados en la ciénaga, se limitó a la construcción de caminos en su interior, utilizando el sistema de “tamandas”, que es semejante al de la chinampería desarrollado en otros lugares para la agricultura y la construcción de algunas lomas funerarias. La agricultura fue una actividad complementaria y su subsistencia estuvo basada en la pesca, la caza y la recolección.


Formación geológica y fisiografía de la ciénaga
A decir de Carmen Castañeda, González Ruvalcaba asegura que “el primero que llamó ‘Mare Chapalicum’ a la laguna de Chapala fue fray Antonio Tello en el Libro IV de su Crónica Miscelánea de la Sancta Provincia de Jalisco, concluida en 1653. [...] González Ruvalcaba concebía al lago de Chapala, como un verdadero mar con sus bahías, canales, cabos, islas y puertos por lo que también lo nombró Mar Chapálico.” Los españoles al ver el lago de Chapala por primera vez, lo denominaron “mar chapálico” para expresar su gran tamaño y sus características que lo asemejaban con un mar aludiendo, sin saberlo, al pasado remoto de la región de la cual forma parte.

Efectivamente, los geólogos afirman que el lago de Chapala y su Ciénaga, forman parte de una zona que en el pasado se encontraba sumergida en un océano y que, por un movimiento telúrico, fue elevada y cercada por cerros creándose así un enorme lago de agua salada de alrededor de 22,000 km². Se extendió desde el sur de la actual ciudad de Aguascalientes, Verde en el norte, el río Lerma al oriente en La Piedad de Cabadas, Michoacán, al poniente en La Venta-Primavera y al sur en la Ciudad de Tuxpan. Hacia el estado de Michoacán incluía a los lagos de Pátzcuaro y Cuitzeo y se le calcula una edad de 38,000 años usando la técnica del carbono 14.

El lago de Chapala y su Ciénaga pertenecen a la cuenca Lerma-Chapala-Santiago que, por cierto, en tiempos de la conquista española, delimitaba las zonas denominadas Mesoamérica y Aridoamérica. Esta cuenca cubre una superficie de 125,555 km², de los cuales, aproximadamente el 30% es parte del río Lerma, 8% del lago y 62% del río Santiago; se calcula en alrededor de 5 mil millones de m³ el promedio de agua anualmente acumulada en sus lagos: Chapala, Cuitzeo y Pátzcuaro. El cauce principal del río Lerma es de 1,194 km, de los cuales el 29% corresponde a elevaciones superiores a los 2,200 msnm, el 50% entre los 2,000 y los 1,500 y una tercera parte abajo de los 500.

Por lo que se refiere a superficie y profundidad, los investigadores proporcionan datos contradictorios. Rodríguez Langone asegura que el lago de Chapala tiene un embalse máximo de 6 mil millones de metros cúbicos, una profundidad máxima de 13 metros y una superficie de 114 000 hectáreas, una longitud de oriente a poniente de 86 kilómetros y una anchura de 25 kilómetros, en tanto que Mejía Núñez presenta cifras diferentes: “El lago se ubica a 1500 mts sobre el nivel del mar, su extensión es de 1750 kilómetros cuadrados y cuenta con una capacidad de embalse de aproximadamente ocho mil millones de metros cúbicos.” En cuanto a su jerarquía en el país y en el continente, todos están de acuerdo: es considerado el embalse natural de mayor extensión en nuestro país, ocupa el número 68 a escala mundial, el número 48 en América del Norte, el tercero en tamaño en Latinoamérica, “el segundo en altitud en América y el tercero en tamaño en América Latina.”

Desde su formación geológica, el lago ha cumplido la función de vaso regulador de la cuenca, mediando entre el río Lerma que desemboca en él y el Santiago que ahí nace y que, después de un recorrido de 443 km, desemboca en el océano Pacífico a 16 km al noroeste de San Blas en el estado de Nayarit. El enorme depósito de agua salada que originalmente constituyó al lago, se convirtió en receptáculo anual de enormes volúmenes de agua dulce provenientes principalmente del río Lerma, que captaba las aguas de múltiples arroyos y ríos a lo largo de su cauce. De esta manera, cada año era menor la cantidad de sales contenidas por el agua del lago hasta, en alrededor de 30,000 años, quedar convertido en lago de agua dulce. La fauna y vegetación originales sucumbieron al cambio del medio y sólo algunas especies de la familia del actual pescado blanco, se fueron adaptando poco a poco a las nuevas condiciones que, también, paulatinamente se fueron transformando. Algunas especies habitantes de ríos, estanques y arroyos afluentes del Lerma y el Duero se incorporaron al lago.

Antes de la dinamitación del retén de la desembocadura del lago en el río Santiago, de la desviación del cauce del río Duero y de la desecación de la Ciénaga de Chapala que implicó la supresión de alrededor del 25% de su superficie, las fluctuaciones del nivel de las aguas del lago se mantenía elevado, quedando al descubierto las partes más altas del territorio ocupado. Sin embargo, aunque reducida notablemente en capacidad, el lago de Chapala mantiene su carácter de vaso regulador hasta la actualidad.

Tortolero calcula la precipitación pluvial en la zona en una variación que va de los 800 a los 400 m³ por año, en tanto que la UNESCO establece el promedio anual en 722 mm. El clima es templado con 19.9º C en promedio y oscilaciones entre los 30º y los 9º C, con lluvias en verano. Todos los autores coinciden en señalar que el lago es termorregulador por la enorme cantidad de vapor que genera. “La evaporación es muy grande pudiendo estimarse en unos 1 500 millones de m³ al año. Algunos hidrólogos estiman la evaporación media en 1 000 millones de m³ anuales, cifra que, aunque conservadora, muestra la importancia de las pérdidas por evaporación.”

Además de la contaminación y de la disminución de su capacidad por la desecación de una cuarta parte de su superficie, el lago de Chapala vive el serio problema del azolve. El azolve se produce por la incorporación de partículas sólidas al agua, provenientes principalmente de los suelos deforestados de la cuenca que han sido destinados a la agricultura y a la ganadería. El señalamiento de Jiménez Ramírez es muy ilustrativo: “Entre los factores que han influido en la desecación del lago es necesario considerar el azolve. La situación del azolve en el lago se puede documentar de esta forma: de 1930 a 1977 han entrado al lago 78 millones de m³ de sedimentos por el río Lerma, azolvando este cuerpo de agua, ocasionado por diversos factores, entre otros, la deforestación a lo largo de la Cuenca, el deslave y la erosión, lo que reduce progresivamente la capacidad de almacenamiento del lago, en 2.5 Mm³ y aumenta el lecho del lago en 7 mm.” “En los valles se ha perdido superficie debido a la agricultura. Esto ha afectado más al bosque espinoso (con Prosopis laegivata), que prácticamente ha desaparecido, y en menor proporción al bosque tropical caducifolio. Las zonas altas no han sido muy alteradas...”

El antiguo “mar chapálico” acabó convertido en un sistema de lagos integrado por Chapala, Cuitzeo y Pátzcuaro en los que habitan peces endémicos de la familia Atherinidae: pescados blancos y charales. El carácter termorregulador del lago genera un mesoclima que permite la prevalencia de especies vegetales raras como la Euphorbia cotinifolia, “una especie propia del Golfo de México que rara vez se ha recolectado en el occidente del país, se encuentra en la región de Chapala” y otras endémicas como el camote del cerro (Dioscorea remotiflora), la Buddleja sp y la Echeveria chapalensis. En las montañas predomina el matorral subtropical xerófilo y en las partes más altas el encino. Han desaparecido en el lago peces como la popocha, el boquinete, la sardina, la lisa, la barbeta y la lobina y ha disminuido notablemente la población de pescado blanco, charales y bagres nativos (Ictalurus dugesi e Ictalurus ochotereni) por la contaminación y la introducción de la carpa, el bagre (Ictalurus punctatus) y la tilapia.

Existen algunas especies nativas de aves acuáticas y una adaptada: la gaviota del Atlántico. El lago es zona de hibernación de aves acuáticas migratorias y hacia los años sesenta del siglo pasado, muchos humedales de la ciénaga acogían diversas especies migratorias. Con la perforación de pozos profundos, estos humedales han ido desapareciendo.

La Ciénaga de Chapala se localiza entre la parte suroeste de la cuenca Lerma-Chapala-Santiago y el extremo noroeste de la subcuenca del río Duero. Comprende la mayor parte del espacio fisiográfico cenagoso. “La Ciénaga linda al norte con el Lago de Chapala y con el río Lerma; por el noreste con el río Duero, en el tramo que comprende los poblados de Ibarra y Camucuato; al este con Venustiano Carranza y estribaciones cerrriles de Pajacuarán y Guaracha; al sur con las poblaciones de Jiquilpan, Tototlán, Emiliano Zapata y Jaripo y por el oeste con Sahuayo y La Palma.

La Ciénaga de Chapala está enmarcada por formaciones montañosas: la sierra del Tecuán, los lomeríos de la Santa San Nicolás y San Juan Tecomatlán, la sierra de Mezcala, los lomeríos de Ocotlán y Jamay, las sierras de la ribera sur que van de Tizapán, el Tigre y Mazamitla y el cerro de Cojumatlán. La Ciénaga de Chapala se encuentra inmersa en la cuenca Lerma-Chapala-Santiago, que abarca la zona central de la República y comprende parte de los Estados de México, Querétaro, Michoacán, Guanajuato, Jalisco, Aguascalientes, Zacatecas, Durango y Nayarit. (7)


Vamos a las preguntas de reflexión con las que pretendo constatar la retención y conclusiones obtenidas, las cuales pido respondan a través de un comentario de ésta publicación.

¿De qué maneras se relacionan el clima y la vegetación con el tipo de suelo?

¿Con los términos antes descritos, que entiendes como concepto de “suelo” y que tipos de suelos puedes encontrar en tu comunidad?

¿Qué características pueden describir a la región Ciénega?


¿Por qué consideras necesarios los análisis edafológicos en huertos y cultivos?

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